-
Las fuerzas de la naturaleza son invencibles e imparables. Por mucho que el
hombre las dañe, siempre resurgirán. Guarda un respeto hacia la madre
naturaleza, porque en esta es donde nace todo.
Con esta frase presento mis respetos a
todo el ecosistema planetario. Y es que la fuerza de la naturaleza es
implacable, invencible e imparable. Porque nadie puede detener un huracán, un
tsunami o un terremoto, si la naturaleza se enfada, se lo puede llevar todo por
delante y no hay poder que se le resista ni el más feroz ejército puede con
esta. Y por mucho que el hombre la destruya, siempre resurgirá, aunque el
hombre la destruyese por completo, si el hombre desapareciese de la faz de la
tierra, la naturaleza volvería a resurgir, tardase el tiempo que tardase. Por
eso hay que guardar un respeto de veneración hacia la madre naturaleza, que es
donde nace toda la vida.