- El bien auxiliado
por la sabiduría siempre triunfa.
Sí, solamente con la cualidad del bien uno fracasa,
pero el bien auxiliado por la sabiduría acaba por triunfar, pues cuando uno es
bueno y además actúa con cabeza, acaba haciendo grandes logros.
- El bien auxiliado
por la sabiduría siempre triunfa.
Sí, solamente con la cualidad del bien uno fracasa,
pero el bien auxiliado por la sabiduría acaba por triunfar, pues cuando uno es
bueno y además actúa con cabeza, acaba haciendo grandes logros.
- Por cada lección
que enseñes a tus hijos, será un disgusto que evitarán en el futuro.
Sí y es que por cada lección que enseñes a tus
hijos, serán disgustos que evitarán en el futuro. Es mejor que un padre enseñe
a sus hijos todo lo que sabe, así el hijo no cometerá los mismos errores que el
padre.
- La gracia de una
mujer es tan encantadora como hechizadora.
Las mujeres son como si tuviesen un encanto
especial, con su belleza y su feminidad hechizan a los hombres. Ciertamente las
mujeres tienen un atractivo especial que seduce siempre a los hombres.
-
Cuando uno está en
un momento delicado, para superarlo necesita ser más duro incluso que el
diamante.
Es verdad y es que cuando uno está en un momento
delicado, la única manera de superarlo es ser más duro incluso que el diamante.
Pues quien es más duro incluso que el diamante, se sabe reponer de cualquier
situación por nefasta que sea.
-
La
soberbia despierta antipatía y la antipatía despierta guerras. La humidad cura
la soberbia y por tanto si hay humildad hay paz.
Claro y es que la soberbia en muchos despierta
antipatías y las antipatías a su vez despiertan guerras, en cambio la humildad cura
la soberbia y es por eso que si muchos son humildes hay paz en el mundo.
-
No
existe un perdón más verdadero, que un fuerte abrazo de corazón.
Bonita frase. Y es que no hay en este mundo un
perdón más auténtico, que un apretado y fuerte abrazo de corazón. Cuando dos
personas peleadas se reconcilian con un fuerte abrazo, ese es el mejor perdón
que se pueda dar.
-
No hay que ser ni implacable ante el fracaso ni adulador ante el éxito, hay que
ser comprensivo ante el fracaso y alegre ante el éxito.
Buena frase. Y es que hay muchas
personas que son implacables ante el fracaso de los demás y aduladores ante el
éxito del otro, es por eso, que lo mejor es ser comprensivo ante el fracaso de
otro y alegrarse de los éxitos de los demás.
-
De una mala experiencia puede salir una frase sabia extraordinaria.
Por supuesto y es que de las malas
experiencias aparte de aprender uno también puede sacar frases sabias muy
buenas. Y es que no hay mal que por bien no venga y de lo malo también se puede
sacar algo bueno.
-
Si el juguete ya se rompió hace años, jamás lo recuperarás, pero siempre puedes
buscar la forma de adquirir uno nuevo.
Con esta frase quiero decir, que si algo
se perdió hace años ya se perdió para siempre y ese algo ya jamás lo
recuperarás. Pero lo más inteligente es ingeniárselas para conseguir algo otro
nuevo.
-
Hay algo que uno nunca deja ni debe de dejar de hacer en la vida: aprender.
Pues sí, uno constantemente está
aprendiendo y uno jamás debe de dejar de aprender de la vida ni tampoco lo
hace, pues la vida constantemente te enseña. La vida es un continuo
aprendizaje.
-
De una triste desgracia puede nacer la más dichosa de las bendiciones.
Pues sí, de hechos realmente terribles
aunque parezca increíble pueden nacer las mejores de las dichas, pues uno
descubre cosas y prueba cosas nuevas que le hacen prosperar mucho.
-
La felicidad del hijo es el juego; la felicidad del padre es procurar la
felicidad del hijo.
Buena frase. Y es que la felicidad del
hijo es la de jugar con sus juguetes o con sus amigos en cambio la felicidad de
los padres es la de procurar la felicidad de los hijos. A un hijo hay que
educarle para que algún día llegue a ser alguien y sea feliz de verdad.
-
Hacer las cosas ordenadamente es fundamental para lograr un buen trabajo y
siempre es garantía de éxito.
Pues sí, cuando uno hace las cosas en
orden, al final le sale un buen trabajo y hacerlas en orden es garantía de
éxito. El orden es muy importante para lograr todos tus objetivos.
-
El amor no es como empieza, sino como acaba.
Frase inteligente. Y es que el amor no
es como empieza, pues todos los amores empiezan bien, sino como acaban, pues al
final muchos acaban en riñas y en divorcios. Es por eso que la gracia de esta
frase no es como empieza el amor, sino como concluye.
-
No hay nada más tentador que lo inalcanzable y uno lo observa con un extraño
sentimiento de felicidad en el corazón.
Cierto, lo que no está al alcance de uno
siempre resulta tentador y uno lo observa con un extraño sentimiento de
felicidad en el corazón, pues es como si pudiera conseguirlo pero al mismo
tiempo algo o alguien se lo impidiese.
- No subestimes la pequeña lucecita de una verdad,
pues cuando se demuestre verdadera será una luz enorme.
Buena frase. Uno
nunca debe de subestimar una verdad por pequeña que sea pues esa verdad puede
crecer y crecer hasta ser de un tamaño enorme y alumbrar a todos. Hay que
siempre buscar el camino a la verdad.
-
El escalón que precede al éxito, es el reconocimiento.
Buena frase. Os voy a contar mi caso, en
2019 creé mi primer blog: https://lasabiduriadekimut.blogspot.com
y bueno lo cierto es que también las imágenes que creaba las colgaba en una
popular página de juegos y la verdad es que arrase, tuve muchísimo éxito, mis
frases calaron hondo y una de ellas hablaba de privacidad y como yo no tenía
ningún dato personal puesto, solo decía: “Soy un chico” y el enlace del blog,
recibí cientos de positivos de jugadores que también ahora ellos decían “Soy un
chico” o “Soy una chica”, el éxito fue abrumador en aquella página de juegos y
de ahí se puso de moda decir “Soy un chico” o ”Soy una chica”. También observé
que muchos aparte de quitar información borraban fotos así que el éxito fue
total pues toda la página me copió y en esa página debe haber fácilmente
cientos de miles o tal vez millones de jugadores. Pues gracias al
reconocimiento que tuve, tuve un éxito ya no grande sino total y es por eso que
el reconocimiento es el escalón que precede al éxito.