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Un rasgo fascinante de una persona es el atrevimiento. Cuando uno se atreve
averigua hasta donde alcanzan sus límites y puede mostrar algo maravilloso al
mundo. Ser algo atrevido a la larga es muy beneficioso.
Algo fascinante de cualquier persona es
que sea atrevida. Cuando uno da el salto y se atreve al menos averigua hasta
donde alcanzan sus límites y además puede mostrar algo maravilloso al mundo.
Ser demasiado atrevido tal vez sea peligroso pero ser algo atrevido a la larga
es enormemente beneficioso.