Por
increíble que parezca el corazón muchas veces es más sabio que la razón.
Pues sí, a veces guiarte por el corazón
puede ser mucho más sabio que guiarte por la razón, porque el corazón por
extraño que parezca muchas veces acierta más que la razón, pues lo que te dicen
tus sentimientos no pueden estar equivocados.