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El amigo traicionado queda como un cementerio, lleno de pena, lleno de dolor y
tristemente olvidado.
¡Excelentísima frase! Y es que el amigo
traicionado quedaría como un cementerio, lleno de pena por la pérdida, lleno de
dolor por la traición y tristemente olvidado pues su amigo le abandonó,
mismamente como un cementerio, la gente que hay está llena de pena, por la
pérdida de un ser querido, llena de dolor por el sufrimiento tan grande de
haber tenido una pérdida trágica recientemente y tristemente olvidado, como
quedan algunas lápidas de personas que ya nadie las visita ya desde hace muchos
años. Muy buena analogía, pues la comparación es muy realista.