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El mal sobra tanto en este mundo como la muda le sobra a la serpiente.
Buena analogía. Y es que si hay algo que
sobra en este mundo es el mal, al igual que la muda de piel le sobra a la
serpiente, el mal sobra en el corazón de algunas personas. Uno se debe deshacer
del mal al igual que la serpiente se deshace de su muda. El mal siempre es algo
execrable, siempre es algo a evitar.