Frase muy útil. Y es que muchas veces las personas
pensamos que hay que gastar mucho para ser felices y no es verdad. Porque
aunque el dinero lo necesitarás porque es vital e imprescindible, las mejores
cosas en la vida son gratis, por ejemplo, amar, besar, abrazar, reír, jugar,
etc. Me gustó mucho esta frase porque es antimaterialista. Al final las mejores
cosas en la vida no cuestan nada, porque el amor hacia tus seres queridos no
tiene impuestos. Genial reflexión, no hace falta ser rico para disfrutar de la
vida.