Útil refrán español. Lo tengo escuchado desde mi
infancia. Y muy sabio, pues cuando uno lo quiere todo, lo que acaba ocurriendo
es que lo acaba perdiendo todo, la avaricia siempre rompe el saco. Más vale
decantarse por una cosa u otra, pues si uno lo quiere todo, al final el saco
está tan lleno que acaba reventando. Hay que tener este refrán en cuenta, pues
quien mucho abarca poco aprieta y quererlo todo también significa perderlo
todo.