Esta frase es muy importante. Pues uno si no lo
intenta no sabe qué resultado va a obtener y es por eso mismo que el fracaso
más grande es nunca haberlo intentado. Si uno al menos lo intenta, saldrá de
dudas si pudiese haberlo conseguido o no pero si no lo intenta permanecerá dudoso.
Gran proverbio, pues siempre anima a intentarlo.